Esta adquisición, que implicó una importantísima inversión provincial, es parte del compromiso continuo de la empresa por asegurar la calidad del agua que llega a los hogares rionegrinos.
La compra, contempló dos tipos de arena con diferentes granulometrías, seleccionadas específicamente para su uso en la reposición y recambio de los mantos filtrantes. Estos materiales se destinarán a los filtros de todas las plantas en las localidades donde Aguas Rionegrinas presta servicio.
La renovación de estos mantos es crucial para mantener y optimizar la eficiencia en la etapa de filtrado del proceso de potabilización.
Además, esta inversión estratégica se enmarca dentro de las preparaciones previas a la temporada estival, un período en el que la demanda de agua aumenta significativamente. Al realizar el recambio de la arena antes de esta época, Aguas Rionegrinas se asegura de estar en condiciones óptimas para afrontar el incremento en el consumo, garantizando un suministro continuo y de calidad durante los meses más calurosos.
En los próximos días, se coordinará la logística para el traslado de la arena según la necesidad de cada localidad.