“Durante el fin de semana se pusieron cebos y pegatinas en el edificio de la Escuela 266 y luego, en los días subsiguientes se estuvo controlando sin que se encontrara ningún roedor, ni excrementos”, explicó la coordinadora del Consejo Escolar Bariloche, Beatriz Alarcón
A la vez, indicó que “la directora, incluso, le informó a las familias el trabajo que hicimos el Consejo Escolar junto a la URESA y el resultado que tuvimos después de controlar todos estos días”.
Por su parte, desde la URESA Andina, se destacó que “el trabajo conjunto entre las dependencias de Salud y Educación permiten una mirada interdisciplinaria e interinstitucional para abordar el problema y encontrar soluciones conjuntas que protejan la salud de la comunidad educativa”.
El trabajo desarrollado, se señaló desde esa Unidad, consistió en “auditorías a escuelas para relevar la situación edilicia e higiénico-sanitaria de los espacios, la realización de informes de auditoría, la revisión de protocolos de actuación para la prevención de ingreso de plagas, y recomendaciones acerca de cómo actuar ante la aparición de roedores”.