Del total, la provincia aportó al lote 21.992,7 kilos provenientes de las cooperativas Ganadera Indígena (Jacobacci), Amulein Com (Comallo), Peñi Mapuche (Ñorquinco), La Amistad (Valcheta), Nueva Esperanza (Laguna Blanca), Calibui (Jacobacci), Cla Nehuen (Las Bayas), Peumayen (Pichi Leufu), Pichi Cullin (Corralito). También se sumó el Campo Anexo Pilcaniyeu de INTA Bariloche.
En tanto que la provincia de Chubut aportó 17.113 kilos de la Cooperativa Vuelta al Campo y Paso de Indios.
La venta se realizó mediante licitación de precios y fue la firma Pelama Chubut SA quién se adjudicó el lote a un precio promedio de USD 10,94 por kilogramo, con condiciones de pago del 50% a 15 días y el saldo a los 45 días.
Representa un muy buen resultado ya que supera el precio obtenido en la venta de otoño (USD 10,35) y refleja una valorización del trabajo realizado.
La fibra ofrecida es trabajada bajo las pautas de calidad del Programa Mohair, reconocida por su calidad y presentación, y es avalada con los resultados de los análisis realizados en el Laboratorio de Fibras Textiles de INTA Bariloche. Desde el Programa se brinda la capacitación, se cubre parte de los gastos de logística y acondicionamiento y se financia un Plan de Mejoramiento Genético.
Las organizaciones cuentan además con asistencia técnica del Ente de Desarrollo de la Región Sur, INTA y la SAFCI y con apoyo financiero de la Secretaría de Ganadería de Río Negro que todos los años pone a disposición créditos blandos para prefinanciamiento comercial.
Las ventas conjuntas y organizadas como estrategia contribuyen a mejorar la competitividad del sector, le permite al pequeño ganadero ganar escala comercial, acceder a mejores mercados y en un marco de formalidad.
El resultado de este trabajo beneficia de manera directa a unas 300 familias e implica una inyección de más de $24.000.000 a la economía regional.
Este programa de origen nacional, desde 1998 apoya y beneficia a los pequeños productores. Con el objetivo de mejorar la presentación de la fibra de las cabaras de angora, su comercialización y mejoramiento genético, y por ende la calidad de vida de los productores, funciona en Río Negro desde hace seis años. Las ventas se llevan a cabo cada otoño y primavera, con exitosos resultados.