Con la llegada de los días más cálidos, los destinos cordilleranos se preparan para posicionarse nuevamente entre los más elegidos por quienes buscan vivir aventuras en contacto con la naturaleza, entre paisajes mágicos, bosques milenarios, encantadores cerros y unos cristalinos cursos de agua ideales para refrescarse de un chapuzón o practicar actividades náuticas.